El Barça de Cruyff, tras tres años en el banquillo, había ganado su primera Liga a pocas jornadas del final y se preparaba para la final de la Recopa ante el Manchester United. La euforia, entonces, no se contuvo para preparar la final. Tampoco el míster era tan humilde, modesto y políticamente correcto como el de ahora. Cruyff, como pasó años después con el Milan de Atenas, picó al rival con sus declaraciones. En su última rueda de prensa soltó que "los ingleses juegan como hace un siglo", un comentario que enfureció a jugadores y seguidores del United. Guardiola, en cambio, es de lo más respetuoso con el rival y con "el señor Ferguson".
Por cierto, Pep puede hacer historia no sólo por el triplete, por el 2-6 o por haber cantado todos los bingos posibles en su primer año. Sino, también, por el hito futbolístico de hacer una alineación de la final de la Champions con sólo dos defensas: Puyol y Piqué. Eso sí, mucho músculo y superpoblación en el centro del campo. Será la batalla clave de la final
Ferguson 2009-Ferguson 1991
El entrenador escocés nos caía bien. Como entrenador del Aberdeen le había birlado una final de la Recopa al Real Madrid. En Old Trafford llevaba ocho años y no había ganado ni un título. Pero lo mantuvieron y, ante el Barça, consiguió que el United alzase un trofeo después de 23 años. Después de ganar al Barça dijo que habían marcado el primer gol a balón parado al Barça y el segundo al contragolpe, que era la forma que habían estudiado con que nos podían dañar. Dieciocho años después, estos siguen siendo nuestros talones de Aquiles y el análisis sigue vigente. Con el tiempo no sólo ha conseguido ser 'Sir Alex' sino que ha montado y desmontado tres veces un equipo campeón y es un ejemplo mundial. Esta temporada, sin ir más lejos, de dentro del club ha salido la idea de convertir a Guardiola en nuestro Ferguson. Pep no está por la labor. Ni quiere el Príncipe de Asturias ni le interesa eternizarse porque es el primero en saber que los resultados mandan. Él sólo piensa partido a partido y así de bien nos va. El miércoles será un honor verles juntos en el Olímpico. El Sir i "tot un senyor"
Iniesta 2009-Stoichkov 1991
La temporada empezó con el 'stage' de Saint Andrews, premonición de lo que vendría después. Gracias a San Andrés y su aparición milagrosa en Stamford Bridge con su "hole in one", el Barça puede completar, con permiso del equipo de las 5 Copas, su temporada más gloriosa. Uno tiene la sensación de que Iniesta le pegó con tantas ganas a ese balón que ahí se le empezó a desgarrar el músculo del recto anterior de su pierna derecha que ahora nos tiene a todos en vilo. En los días anteriores a la final del 91, todo el barcelonismo estaba pendiente de la recuperación a toda marcha de Stoichkov, el jugador más determinante para ganar esa Liga. En la víspera del encuentro supimos que el búlgaro no llegaba a tiempo. Mañana sabremos si Iniesta podrá disputar la final. Ojalá
Keita 2009-Ferrer 1991
Resulta increíble que a un profesional como Keita le pidan que juegue de lateral izquierdo en el partido más importante que disputará en su vida y no sólo no lo vea claro sino que haga públicas sus dudas y sus temores. Seydou da pistas al rival, pone en un aprieto al entrenador y crea desconfianza en nuestro sistema defensivo. Menuda diferencia con un jovencísimo Chapi Ferrer al que Cruyff le encomendó en el 91 secar a Sharpe, la rutilante estrella del United, y no sólo consiguió anularle sino que Ferrer fue el mejor jugador del Barça de esa final, a juzgar por las notas que le pusieron todos los periódicos. Confiemos en la capacidad de persuasión de Guardiola y, si no, Sylvinho o Cáceres seguro que se comerían el mundo para ser titulares. Y, no digamos ya, el joven Muniesa
S.Busquets 2009-Carles Busquets 1991
En Roma, el Barça no podrá contar con tres titulares como Alves, Márquez o Abidal. En Rotterdam, la sangría de ausencias fue más dolorosa pues afectaba, de arriba a abajo, la columna vertebral del equipo. Además de la lesión de Stoichkov, Zubizarreta y Amor fueron sancionados por las tarjetas que vieron en las semifinales contra la Juve. Eso obligó a Cruyff a hacer debutar al portero Carles Busquets en una final europea. En la víspera, el jugador le comentaba a Alberto Sanchís, de MD, que "si me lo dicen en verano me hecho a reír". Seguramente, su hijo Sergio, gran revelación de la temporada,si le llegan a decir también en la pretemporada que sería titularenla final de la Champions se habría partido el pecho. Se lo ha ganado a pulso. Y ahora, a por la revancha del padre
Txiki 2009-Txiki 1991
Aunque Johan Cruyff haya dicho en distintas entrevistas que en las finales europeas nunca hacía jugar a su amigo Begiristain, la hemeroteca resulta ser demoledora para el desmemoriado holandés. Ya en la Recopa de Berna ante la Sampdoria, Txiki había sido el extremo izquierdo titular del Barça. Lo fue de nuevo ante el United dos años después. Sin embargo, el ahora secretario técnico no cuajó un buen partido. Sacó la peor nota del equipo según MD y, en el análisis uno por uno de los jugadores, le definieron como "Náufrago. Anduvo perdido y sin encontrar su sitio". Ahora lo ha encontrado. Siempre podrá decir que él puso a Guardiola en el banquillo.
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