26 de agosto de 2009

Tu ausencia

Son recuerdos indescriptibles mis experiencias contigo
que reafirmas a través de la convivencia diaria:
Auspiciosa, emocional, vehemente y hasta celestial.
El otrora permanente vacío me permites olvidar.

No quiero extrañar tu don de la ubicuidad.
Cuando no estás mis rodillas se doblan,
mi corazón se acelera y repaso cosas irrecordables,
corre por mi espalda un sudor muy frío.

Me contemplo absorto en mi obstinado silencio,
pienso acallar los estertores del alma.
Mi verdad impoluta es encomendarme al destino,
demostrar que estar sin tí no tiene sentido.

Mario Francia

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hey maitro: Buénale.

Saludos.

@elsum dijo...

excelente maestro... muy bueno!!!